PlasticRoad: una carretera fabricada en su totalidad de plástico reciclado
En Wavin nuestro propósito es construir entornos saludables y sostenibles. Uno de nuestros ejes de acción es mejorar el desempeño en la construcción, creando soluciones eficientes y sostenibles para la construcción y la vida.
En 2018, la ciudad natal de Wavin, Zwolle en los Países Bajos, se convirtió en el primer sitio oficial del mundo en tener una carretera verdaderamente plástica. Una carretera de 30 metros se abrió al público el 11 de septiembre de ese año. La carretera incluye sensores que proporcionan información para mejoras futuras, espacio para el tendido de servicios por debajo y su propio sistema de manejo de aguas pluviales
“PlasticRoad” como se le dominó a este innovador proyecto, se instala rápidamente, viene en secciones prefabricadas y es fácil de reemplazar, por lo que nunca tendrá baches.
“La innovación es nuestra piedra angular. La sostenibilidad, el núcleo de nuestra empresa. Formar parte de un proyecto destinado a construir una carretera sin asfalto, sin concreto, solo a partir de residuos desechados, no supuso únicamente un desafío. Fue probablemente el proyecto más emocionante de mi carrera” comenta, Marcel Jager, director de producto de Wavin.
Marcel Jager es director de proyectos en Wavin desde hace más de 13 años. Siempre le ha apasionado encontrar soluciones sencillas a problemas complicados.
El principal constructor de carreteras de los Países Bajor, KWS, quería resolver un problema importante: ¿cómo construir carreteras más sostenibles? Dos miembros del equipo, Anne Koudstaal y Simon Jorritsma, sugirieron el uso del plástico, fue entonces cuando KWS se acercó a Wavin para afrontar este desafío.
El primer paso para que PlasticRoad fuera una realidad fue crear un prototipo. La tarea no fue sencilla; en el camino surgieron innumerables obstáculos, pero, tras muchos ensayos y errores, el equipo de Marcel, incluidos los ingenieros Tom Lansink y Twan Boshove, dieron con el modelo de trabajo.
Después se tuvo que aprender a transformar el plástico de un solo uso en algo que fuera suficientemente fuerte para resistir un tráfico constante de vehículos, esto tampoco fue tarea fácil, pero, una vez más Marcel y su equipo consiguieron el plástico perfecto.
Finalmente, en 2016, la carretera estaba lista para un primer ensayo. Wavin, Total y KWS instalaron una carretera de prueba en una empresa de KWS. Cada día durante más de un año, automóviles y pequeños camiones transitaron por esa pequeña carretera de plástico sin ningún problema.
Así llega el 2018 cuando se abre al público la primera carretera plástica del mundo. A finales de ese mismo año, se instaló la segunda carretera en Giethoorn, con el objetivo de probar la PlasticRoad en condiciones de suelo frágil.